La exfoliación con ácidos frutales es una técnica revolucionaria para el cuidado de la piel que utiliza ácidos naturales para exfoliar suavemente las capas superiores de la epidermis. Este método suave es ideal para tratar diversos problemas de la piel, como las líneas de expresión, la hiperpigmentación y el acné.
El tratamiento se basa en el uso de ácidos derivados de frutas, como el ácido glicólico, el ácido láctico y el ácido cítrico. Estas sustancias naturales actúan conjuntamente para disolver los enlaces que mantienen las células muertas en la superficie de la piel, revelando una capa inferior más lisa, luminosa y joven.
Este peeling es adecuado para todo tipo de pieles y ofrece resultados visibles desde la primera sesión. Es especialmente eficaz para devolver el resplandor y la vitalidad a las pieles apagadas o envejecidas. Después del tratamiento, notará una notable mejora en la textura de su piel, una reducción de las imperfecciones y una tez más uniforme.